Naruto y Naruto Shippuden fueron éxitos únicos que marcaron a toda una generación. La serie llegó a su fin con más de 700 episodios en total, pero su popularidad fue tan grande que los responsables debieron hacer algo más.
Más tarde conoceríamos el mundo de Boruto, y una nueva generación de ninjas, y todo este proceso fue revelado por el creador de Naruto, Masashi Kishimoto.
Según Kishimoto, él, junto con los productores, hablaron durante aproximadamente un año antes de decidir qué harían realmente con la franquicia.
La idea de Kishimoto era reiniciar la historia, con otro artista responsable del dibujo. Este reinicio reiniciaría el historial, comenzando en nuevas direcciones.
Sin embargo, se presentó la idea de una secuela, y ya incluía el flashforward de Boruto y Kawaki adultos mientras se enfrentan en Konoha en ruinas. Mira lo que dijo Kishimoto:
"Cuando me di cuenta de que iba a ser una secuela, ya estábamos demasiado avanzados en el proyecto para decir que prefería un reinicio, así que eso es lo que hicimos", dijo Kishimoto.
En otras palabras, la voluntad de Kishimoto nunca fue Boruto en primer lugar, sino un reinicio de su historia original.